jueves, 28 de mayo de 2009

Helado de Twitter

¿A qué sabe Twitter? Es lo que me he preguntado al leer la noticia: "Una empresa de Alicante comercializa helado sabor a Twitter". Sus creadores, un matrimonio con más de 30 años de experiencia en la industria heladera, prometen que será azul y refrescante. Vamos, ideal para el verano (esperamos que no contenga restos de plumas del pajarito).

Un helado azul no es nada nuevo. Hay una generación que seguro que recuerda el Frigurón, el helado con forma de tiburón de Frigo. En sí, la noticia tampoco me llamó mucho la atención, porque por estas fechas los medios de comunicación siempre "repiten" las mismas historias (el año pasado fue el boom del helado de fabada) y terminan siendo previsibles. ¿Qué te juegas a que la semana que viene Madrid Directo va a estar en una piscina municipal hablando del inicio de la temporada de las piscinas?

Sepa a lo que sepa, desde hoy mismo me hago follower del helado de Twitter. Pediré uno de dos bolas (la otra de Facebook).

miércoles, 27 de mayo de 2009

Cinco cosas que me molestan de Twitter

Me mojo. Cinco cosas que me molestan de Twitter (o que simplemente quiero tener en cuenta):

1. La consolidación del twitt "me estoy comiendo un bocata". Pues que aproveche. Para más información sobre este tipo de twitts acudir a El Minutario.

2. ¿Qué sería de algunos "gurús" sin Google? Venga a buscar noticias de social media y venga a twittearlas. Copia pega. Ese es el camino para ser un lider de opinión (cuando uno mismo no tiene nada que decir). Ojo, el que esté libre de pecado que twittee la primera piedra (poniendome a caldo).

3. Agregar sin mirar. Que quiero aumentar el numero de twitteros que me siguen, cierro los ojos, agarro el ratón y ¡ale! a hacerme seguidor de todo el mundo. Alguno caerá y se hará follower mío. Eso es criterio.

4. Hay que estar (por estar) ahí. Pero ¿te has parado a pensar si es la mejor estrategia para tu compañía? Igual no es tu momento (o tu lugar). Aunque también es cierto que algunas empresas atrevidas están abriendo camino (de forma inteligente), estoy contigo viajes (gracias por el comentario). Sin embargo tengo dudas con otro punto, ¿las empresas necesitan Twitter para ser más transparentes?

5. ¿Qué tiempo dedicas en Twitter a dialogar, leer, conversar, responder y atender comentarios? Deja de pensar en cómo vas a sorprender con tu próximo twiit.



martes, 26 de mayo de 2009

Periodismo ciudadano

Si la información es poder, ¿el poder está cambiando de manos? Quizá una parte sí, porque los medios de comunicación ya no son los únicos que cuentan, recomiendan y opinan. Y por lo tanto, se puede generar influencia desde otros lugares. Hablo de los medios sociales. ¿Somos ingenuos creyendo que se está dando la vuelta a la tortilla?

No es nada nuevo hablar de periodismo ciudadano. Lo que sí es (relativamente) reciente es el poder que ha adquirido gracias al escenario 2.0. ¿Pero se puede llamar periodista a un individuo que comparte noticias? ¿Es equiparable su labor a la que ejercen los profesionales (con cinco años de carrera) llamados periodistas? ¿Sería lícito que hubiera cirujanos ciudadanos?

Más cuestiones relativas al poder. El profesor (y bloguero) Ignacio Martín Granados me aclaró algunas dudas cuando expuso su visión del caso Obama, el candidato de Internet. ¿Sabías que el 55% de la población de Estados Unidos utilizó la red como fuente de información durante los comicios? Obama se hizo fuerte (y cercano) a través de los medios sociales y utilizando (de forma muy meditada) los móviles. Por cierto, da gusto escuchar a alguien que se apasiona con lo que habla.

Los medios de comunciación no tienen vuelta atrás. Ellos mismos han reconocido como necesaria la participación del lector como modelo de supervivencia (2.0 = horizontal). Así, resulta fácil encontrar diarios como El País que dedican una sección al periodismo ciudadano bajo el título Yo, Periodista. El lector deja de ser pasivo y se convierte en redactor. El País (como otros diarios) abre las puertas a su público para que envíen noticias a través de Internet o videos desde el móvil.

El debate seguirá ahí. Que se lo pregunten a Pedro J, que dice que "un vecino con una manguera no es un bombero. De la misma manera, un vecino que ve como atropellan a un gato y lo cuenta en internet no es un periodista".

viernes, 22 de mayo de 2009

Competencia desleal

No lo puedo evitar. Tengo que denunciar esto, aunque les esté haciendo "publicidad" (espero que negativa). Quiero hablar de una práctica (totalmente desleal) que una agencia de relaciones públicas ha decidido poner en marcha: ¿Trabajas con una agencia? Dinos cuanto pagas y nosotros te lo hacemos por un 25% menos.

¿Lícito? ¿Sucio? Justifican su campaña diciendo que son tiempos de crisis. Entonces ¿vale todo? La Publicidad tiene un código ético y mecanismos de autorregulación, los profesionales de las relaciones públicas ¿deberían cumplir unos mínimos (éticos)? De momento estoy siendo suave. Les citaré textualmente (que así me caliento). Éste es un extracto de la carta que envían a los posibles clientes:

"Y además, durante nuestra presentación, disfrutarás de un masaje a cargo de un masajista profesional".

Genial. Y de paso se la chupan, ¿no? Intento ser suave pero no me sale decirlo de otra forma. Menos mal que ADECEC (Asociación de Empresas Consultoras En Relaciones Públicas y Comunicación) ha decidido no ser imparcial, primero tachando de "comportamiento desleal" esta acción. Segundo, comunicando que tomará cartas en el asunto (siempre quise escribir esta frase). Tercero, dejando claro que están "atentando contra las reglas de comportamiento ético y la leal competencia profesional" (textual).

Así mismo, ADECEC ha puesto en manos de organismos nacionales e internacionales la denuncia. ¿Qué dirá la prensa? Me preocupa. ¿Qué dirán los clientes? Ahí está la clave. Y no es miedo a que las agencias pierdan clientes. Es miedo a que sirva el "vale todo". Así va el sector.

miércoles, 20 de mayo de 2009

El minutario

El diario, esa "libreta" personal e intransferible, murió hace tiempo. Un Fotolog con ansias de ego, donde se dejaban confesiones (sin pensar en las consecuencias), y algún blog (personal) acabaron con él. El mundo en el que vivimos (que exige inmediatez) hizo el resto. Ya no sirve contar lo que te ocurre a diario. Es la era del minutario.

Entro en Twitter. "Me estoy comiendo un bocata", "Voy camino del aeropuerto", "Preparando la reunión de esta tarde". ¿De verdad tenemos la necesidad de decir lo que hacemos en cada momento, minuto a minuto? ¿Cuál es la verdadera utilidad de social media? Los medios sociales buscan respuestas. "What are you doing?" (Twitter), "¿Qué estás pensando?" (Facebook). El mal entendimiento de estas "herramientas" nos lleva al minutario (y si me apuras al segundario).

El valor de cada perfil creado en los medios sociales no radica en el volumen de comentarios, twitts, o post por minuto, sino en el contenido de cada palabra que se deja en la red. Creo que nos hace (y me hace falta) utilizar de forma responsable (y menos ególatra) los medios sociales, para no caer en un minutario. Corremos el riesgo de convertir Twitter en un GPS de "estoy en Gran Vía esquina San Bernardo".

martes, 19 de mayo de 2009

Una de Twitter y otra de televisión

Ríete de la gallina que twittea. Tiene 173 seguidores y se ha abierto un Facebook para promocionar cursos de cocina. ¿Pero cómo ha conseguido esos followers? Son muchos los twitteros que rechazan la idea de obtener "amigos" agregando previamente al mayor número de personas bajo el lema "alguno caerá". Parece ser que nuestra gallina juega al "te cuelo si me cuelas" (en la cola del colegio) y se ha hecho seguidora de más de 700 twitteros. ¿Es lícita esta estrategia en 2.0?

Más cosas que hacen pensar. La televisión. La censura no es cosa del siglo pasado (aunque lo parezca). Televisión Española nos ha demostrado que se puede hacer censura hoy día (con dinero público). Sí, hablo de la famosa pitada de la final de la Copa del Rey que TVE1 no mostró. ¿Cómo se les ocurre decir que fue un error humano si una semana antes se estaban debatiendo medidas para evitar el abucheo? La solución (lamentable) fue no retransmitir lo que en ese momento era noticia. Pero eso no es lo peor. Más tarde, en el descanso (del partido), intentaron engañar a la audiencia. Mostraron las imágenes que antes habían sido censuradas manipulando el audio, para que la pitada quedara (silenciada) sepultada bajo un himno que sonaba atronador.

Tanto debate y tan poco tiempo para escribir.

jueves, 14 de mayo de 2009

El misterioso viral de las zapatillas colgadas

Un día cualquiera al subirme a un taxi dí las buenas tardes. "Serán para usted" contestó el taxista "que habrá comido, la tarde no empieza hasta que me siento a comer". Cosas de los madriles, la ciudad del mundo en la que se camina más rápido (lo dijeron ayer en las noticias). Dejemos las anécdotas.

Otro día cualquiera. Mediodía (
que en España no significa que sean las 12, sino la hora de comer). Subo por una estrecha calle de Lavapiés. Los cables de la luz parecen tendales ¿de ropa? No, de zapatillas. A la vuelta de la esquina otra calle y más zapatillas. ¿Qué está pasando? Un poco más allá encuentro la respuesta. Dos jóvenes llevan una bolsa de deporte grande. Sacan pares de Converse, nuevecitas (llevan hasta las cajas). Las anudan y las lanzan al aire. Otro par más colgadando del cable.

Lo primero que pensé. "Les pillé. Soy testigo de un viral. Seguro que hay algo detrás". Recuerdo que lo twitteé al instante. Lo siguiente que me vino a la cabeza, "Coño. Están nuevas. Voy a por una escalera". Y así hice. Me lancé a la calle en busca de las zapatillas. Gratis. Y allí estaba yo, con un palo, subido a la escalera, cortando la calle y con una nube de vecinos alrededor (se avecina tormenta).

"Oiga. No cuelgue cosas ahí que ya está bastante sucio el barrio". La indignación iba en aumento. "¿A quién representas para hacer eso?". También estuvo el defensor de los tendales "¿quién os da derecho a quitarlas? Es arte". Pero lo mejor estaba por llegar. Un poco más. Un poco más. Ya está! Primer par en mis manos. Y decepción. "Pero si son del mismo pie". Humillante. Converse lo tenía todo estudiado. Así que bajé. Al instante un camión se detuvo bajo el cable. Tres obreros (espectadores hasta ese momento) subidos al remolque despejaron el cable y se fueron del escenario del crimen (o de lo que pudo ser un viral).

El caso es que desde aquel día tengo las zapatillas (anudadas) en casa esperando que ocurra "un milagro". Y ayer sucedió. Lo descubrí. Shoefiti (graffitis aéreos), una moda (tendencia) basada en colgar prendas de ropa (con mensaje) en los cables de la luz. Converse, además de colgar zapatillas, apoyó está intervención callejera con cartelería (no convencional). Viral conseguido o no, seguí investigando. Es brutal. Internet está lleno de noticias, foros, blogs donde se habla de shoefiti. Unos preguntan a otros ¿cuál es el origen? Hay muchas leyendas. Para mi fue un misterioso viral. Lástima que no tenga dos pies izquierdos. Por cierto shoefiti no está en la Wikipedia. Habrá que subirlo.

Fotografías: www.lanoconvencional.com

miércoles, 13 de mayo de 2009

La gallina que twittea

Cada día una sorpresa. Abro Twitter y me encuentro a Gallina Blanca (y espera que llega lo mejor). Acaban de convertirse en mis followers. Y digo yo, ¿para qué querrán seguirme? Esto huele que alimenta (y no precísamente a caldo) a estar por estar.

Eso es lo que creo. Alguien le ha contado a Gallina Blanca que los medios sociales son el futuro (o el presente) y que hay que estar (antes que nadie). Espero que no se les haya olvidado pensar qué van a hacer cuando ya estén.

Desconozco por completo si Gallina Blanca (o la agencia que les lleva) ha diseñado una estrategia de comunicación 2.0, por lo que me ceñiré al conocimiento que tengo en este momento. Quizá dentro de un tiempo esté hablando de ellos como un ejemplo de éxito (pero lo dudo). Al menos en mi caso creo que nadie ha (investigado) mirado mi perfil antes de agregarme.

Pero ¿qué dice Gallina Blanca en sus twitts? "Y esta noche, qué tal una cremita de almendras". Digamos algo en su favor. Han incluido el enlace a una video-receta. Al menos integran varias plataformas. Punto para la gallina, que no sé si tendrá los huevos de oro, pero los tiene bien grandes para lanzarse (al vacío) de esta manera. Otro punto para ella (por valiente).

¿Sabes qué te digo? Que en el fondo me gusta. Voy a disimular y a mirar de reojo. A ver cómo actúan, ya os iré contando. Igual se pone interesante. Párate a pensar ¿qué hará Knorr? En cualquier caso, me gusta que ocurran cosas. Me gusta que me rompan los esquemas y compañías "tradicionales" intenten demostrar lo contrario (de lo que pienso). Ya lo han intentado con el spot publicitario de "Juan Palomo", pero ese es otro cantar.

Otra cuestión que me preocupa. ¿Qué ocurrirá cuando los usuarios (libres) perciban que las empresas (e instituciones) se están adueñando de su espacio 2.0? ¿Habrá estampida? ¿Saldremos corriendo hacia otros medios sociales aún por inventar?

martes, 12 de mayo de 2009

Los correos abducidos

Es un misterio. Sucedió hace unos días. Encendí el ordenador y abrí el correo. Algo llamó mi atención. No, no eran las ofertas del SPAMercado (alagamientos de noseque, réplicas de nosecuantos). Mis ojos se habían quedado paralizados ante un mensaje y una fecha. Tenía delante de mi un mail abducido en 2005 que, inexplicablemente, había sido devuelto al planeta Outlook 4 años después de su desaparición.

Sí, el correo falla. Lo que desconocía es que tiene la capacidad de devolverte un trozo del pasado. Lo comenté con los que tenía cerca. Y desde aquel día, no he sido el único al que le ha llegado un mail del más allá. Todos los correos abducidos se perdieron en la misma fecha, 2005. ¿Dónde estuvieron todo este tiempo? ¿Quién los retuvo?

Por aquel año trabajaba para eBay. Acabábamos de lanzar PayPal en España, tal y como recogían algunos medios de comunicación. No teníamos Spotify, ni iPhone, ni Eee PC, ni Wii, ni 2.0 (como mucho 1.8). ¿Será que la crisis agudiza el ingenio?


lunes, 11 de mayo de 2009

Nos falta orgullo profesional

Estamos verdes. Tanto 2.0. Tanta red. Tanto hablar de medios sociales (entonces los otros qué son, ¿insociables?). Tanto experto. Tanto visionario 3.0. Tanto gurú. Y tanto aprendiz (como yo). Y no hemos sido capaces de pensar y construir una definición de comunicación 2.0 en la Wikipedia. Os prometo que la semana pasada llegaba a decir que comunicación 2.0 era una actitud (entonces es como el rock, "el rock es una actitud").

Hoy dice así: "La comunicación 2.0 es el intercambio comunicativo mediante la utilización de medios sociales. Tiene como principios fundamentales la interacción, la colaboración y la horizontalidad. En el ámbito de las relaciones corporativas, la manera en que los usuarios de las aplicaciones de la web 2.0 más utilizadas hacen uso de estas herramientas para crear contenido y formar comunidades sin requerir de conocimientos técnicos, puede trasladarse al comportamiento comunicacional de una organización. Algunos de los medios sociales más utilizados por las personas son facebook, myspace, twitter, slideshare, youtube, google, wikipedia".

Es para pensar. Los propios sujetos (activos) que conforman el 2.0 no han sido capaces de definir en la Wikipedia qué es la comunicación 2.0. ¿Como nos van a creer? Somos unos orgullosos, somos testigos de los cambios, pero nos falta orgullo profesional. La prueba del delito.






jueves, 7 de mayo de 2009

Diccionario: Wikihombre

Wikihombre (latín wikihomo, -inis):

De la unión de wiki y hombre (tomado en su acepción neutra, es decir, referente a raza humana, hombre o mujer).

Dícese del individuo despierto, con capacidad "ilimitada" para absorber contenidos (de unos y de otros). Basa su conocimiento en el esfuerzo colaborativo a través de los medios sociales (su objeto de estudio). Abierto al debate. Libre. Receptivo a los cambios. Accesible. En permanente discusión. Predispuesto a analizar, sintetizar y teorizar todo lo referente a 2.0 (3.0, o lo que venga). Sinónimo de wikihumano (en inglés wikihuman).

Corrige o añade tu comentario.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Obsesiones televisivas

Te sientas delante del televisor. Hay un programa de información general. Un presentador (periodista o no) va a dar paso a una conexión en directo. En un pequeño recuadro espera otro periodista. Alcachofa en mano, asiente con la cabeza. Antes de que abra la boca puedes convertirte en el prestidigitador del salón de casa. Dí en voz alta: "Así es". Al instante, el periodista al que iban a dar paso reproducirá tus palabras. "Así es". Infalible.

No hay ningún misterio. Es la coletilla más peinada y manoseada por estos profesionales (periodistas o no). A la hora de poner el título al blog me lo pensé. "Así es" era una gran candidata. Pero opté por "Lo cierto es que". Es mucho más intrigante. Párate a pensar, si "lo cierto es que.." ¿Qué será lo falso? Sería maravilloso utilizar "Lo falso es que..". O mejor aún, "la mentira es que". Siempre me lo pregunto cuando lo oigo. Mis pequeñas obsesiones y autocríticas. Por cierto ¿seguirá existiendo el teletexto cuando sólo quede la TDT? Obsesiones.

martes, 5 de mayo de 2009

Con los oídos pegados a Spotify

Pocas veces he sucumbido ante un capricho digamos "promocional", sintiendo que estaba ante la oportunidad de mi vida. Una de ellas fue en el 89. Pepsi me mandó a casa (gratis) la camiseta de Madonna del disco Like a Prayer. Y es que desde pequeño ya apuntaba maneras. Me apasiona la música. Por eso hoy hablaré de música, porque ha ocurrido algo.

Pero antes de desvelar más detalles, miremos al pasado. Ocurrió hace un par de años. Sala Moby Dick (Madrid). Acababan de suspender un concierto. No duró más de media hora. Había varios heridos. El cantante del grupo había destrozado parte de la sala. En uno de sus arrebatos se colgó del techo. Él y una inmensa bola de cristales se precipitaron al vacío y cayeron sobre los espectadores, dejando a su paso varias cabezas abiertas. A la salida estaba la policía, tomando nota de las pertinentes denuncias. Los diarios del día después hablaban de vergüenza, ¿una operación de marketing para promocionar al grupo?

Fui testigo del numerito y de un ruido descafeinado, mal entendido, mal interpretado por aquella banda de niñatos. Dos años después se me han pegado los oídos (como las sábanas) a Spotify. Estoy escuchando el segundo disco de The Horrors, los mismos que dejaron su tarjeta de presentación en Madrid hace dos años. Huele a garaje, a Joy Division, a The Cure y en algún momento a The Doors. Grata sorpresa.

Pero todo esto no era más que una excusa para hablar de Spotify. Antes comprábamos discos. Los poseíamos. Los exhibíamos en estanterías. Después descargábamos archivos. Los poseíamos. Los acumulábamos en el MP3. Ha llegado la era de no poseer nada. Ni discos, ni archivos. La música está ahí. Suena. Gratis. Sólo necesitas Internet, que algún día también será gratis. Sí, Internet será gratuito y accesible (en las ciudades). Algún día. ¿Lo crees?